​En Latinoamérica se necesitan 33 años de ahorro para adquirir una vivienda

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Rubro inmobiliario (1)


En muchos países del mundo, se está experimentando un fenómeno que, si bien no es nuevo, se ha visto acentuado por diversos factores asociados a la inflación y el aumento de las tasas de interés por parte de los bancos. En nuestro país, el sector inmobiliario vive una de las crisis más importantes de su historia, con las tasas de interés más altas en los últimos 14 años, lo que ha frenado las ventas y dificultado el acceso a la vivienda para gran parte de la población.


Según el informe “Vivienda Latam”, si una persona latinoamericana de 25 años ganara un salario de 400 dólares y destinara 100 por ciento de sus ingresos a la compra de una vivienda de 55 m², en promedio terminaría de pagar alrededor de los 58 años. Sin embargo, si usara únicamente 25 por ciento de ese sueldo, cumpliría su meta a los 158 años.


Por otro lado, el último informe de Estadísticas Financieras y Monetarias del Banco Central reveló que la tasa de interés promedio anual en UF para los préstamos hipotecarios se situó en un 5%. Si bien, las tasas sufrieron una disminución de 21 puntos base respecto a diciembre de 2023, no es suficiente para solucionar el problema de las ventas de viviendas.


Según datos entregados por la Cámara Chilena de la Construcción (CChC), en Santiago, el stock de viviendas sin vender alcanzó un récord de 68.000 a mediados del año pasado y desde entonces apenas se ha reducido a 66.000.


Héctor Osorio, economista de PKF, advierte que el aumento de las tasas de interés podría dificultar el cumplimiento del umbral de pago para muchas personas. “La dinámica del mercado de la vivienda revela que, ante un aumento en las tasas de interés, los potenciales beneficiarios de créditos hipotecarios se perciben como clientes de mayor riesgo para las instituciones crediticias. Esta percepción lleva a estas entidades a mostrar cautela en la concesión de dichos créditos”, agregó Osorio.


Actualmente, el aumento de las tasas en los créditos hipotecarios, el elevado valor de las propiedades y el crecimiento en el costo de vida hacen que acceder a una vivienda sea cada vez más difícil. A pesar de estos desafíos, se están desarrollando y diversificando alternativas de inversión para aquellos que buscan oportunidades en el mercado inmobiliario

¿Qué alternativas existen para las personas que no califican para un crédito hipotecario en Chile?


● Renting Inmobiliario: Este modelo permite arrendar una propiedad con la opción de comprarla en el futuro. Los periodos de los planes son de tramos de 5 años, donde adquieres los porcentajes sobre la propiedad que estás arrendando. Esto significa que en un plazo de hasta 30 años podrás adquirir la propiedad y ser dueño. Algunas de las alternativas para este tipo de servicio es el ofrecido por Loping.cl.


“Con el Renting Inmobiliario buscamos involucrar a todos los actores del mercado en una solución que beneficie a todas las partes, con el objetivo de superar el cuello de botella y la obsolescencia causada por la excesiva dependencia de la deuda hipotecaria como principal vía de acceso. Esta dependencia afecta a proveedores inmobiliarios, propietarios y usuarios finales, y buscamos eliminarla en conjunto”, agregó Ivan Muena, CEO de Loping.


● Leasing habitacional: El leasing inmobiliario, también conocido como leasing habitacional, es un acuerdo mediante el cual una entidad financiera adquiere un inmueble a solicitud del arrendatario (el cliente), para luego arrendarlo por un período de tiempo determinado. Al finalizar el contrato, el arrendatario generalmente tiene la opción de comprar el inmueble


● Arriendo con opción de compra: Algunas inmobiliarias, ofrecen esta modalidad, con tal de dar a los usuarios la opción de ir juntando por un periodo limitado el pie necesario mientras arriendan la propiedad, para poder terminar postulado a un crédito hipotecario convencional para adquirirla una vez logren juntar el pie mínimo exigido y continúen siendo calificables comercialmente para dicho crédito.


Es importante tener en cuenta que, si bien tanto el Leasing como el Renting inmobiliario ofrecen una forma de usar un inmueble sin necesidad de comprarlo, difieren en aspectos como las salidas, la opción de compra al final del contrato, la duración y las responsabilidades del arrendatario.


europapress