Contradicciones por caso "Narcogenerales"
La noticia que ha acaparado la atención de los medios de comunicación en Ecuador y américa latina y en el conjunto de la población nacional es la que tiene que ver con las declaraciones hecha por el embajador de los Estados Unidos (EE-UU) Michael Fitzpatrick al medio digital “Primicias” en entrevista el 10 de diciembre de 2021, quien sostiene que su país se encontraría muy preocupado por la penetración del narcotráfico en Ecuador y afirma además que este mal habría penetrado en las esferas de las fuerzas del orden.
Fitzpatrick, es embajador de EE-UU en Ecuador, es un diplomático de carrera del servicio exterior con rango de Ministro Consejero, se habría unidos al servicio diplomático en 1988, tiene estudios de pregrado y maestría en asuntos internacionales (políticas de seguridad internacional) ha ocupado importantes cargos como Subsecretario Adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental a cargo de la región andina, Brasil y el cono sur, entre otros.
Un personaje con tal hoja de vida, lo menos que se puede pensar es que sus declaraciones tengan algo de verdad “Estamos muy preocupados por la penetración del narcotráfico en Ecuador y en las fuerzas del orden. Y el presidente (Joe) Biden acaba de anunciar una nueva estrategia nacional anticorrupción, que tiene mucho que ver con nuestro trabajo multilateral para contraatacar este tipo de problemas (...) nota extraída del diario el Universo Ecuador 13-12-2021.
Según se ha manifestado que ya se habrían realizado acciones concretas sobre este tema, por lo que se habrían retirado visas norteamericanas a algunos “narcogenerales” aunque no se han dado nombres de quienes serían los generales involucrados, pero al mismo tiempo se anuncia que se estarían investigando estos y otros casos de penetración del narcotráfico en instancias militares e inclusos policiales, se entiende que no se han dado nombres todavía para no entorpecer las investigaciones.
Situación dramática que entorpecería según se ha dicho, las oportunidades y buenas intenciones para el Ecuador que se están diseñando desde el gobierno del presidente Biden, cuando se menciona que desde hace algún tiempo se ha estado colaborando para el esclarecimiento de casos emblemáticos de corrupción en el país, como el desfalco la Instituto de Seguridad Social de la Policía Nacional (ISSPOL), el caso denominado las Torres, el sonado caso Alex Saab, que tendría en vilo incluso a funcionarios del actual gobierno del presidente Lasso.
Estas declaraciones pondrían entre dicho toda la afamada lucha contra la corrupción y el narcotráfico que se ha anunciado por parte de autoridades policiales y militares. Frente a esto, se necesita respuestas inmediatas y contundentes, pero hasta el momento lo que hay es un comunicado del Ministerio de Defensa y el Ministerio de Gobiernos en la que se sostiene que de entre las filas de las fuerzas del orden no se le habría retirado visa a ningún general en servicio activo, pero no se hace referencia a los familiares a quienes se les habría retirado las visas. Es necesario que se desvirtúe de manera categórica las declaraciones del embajador Fitzpatrickq, que de no ser ciertas lesionaría gravemente el buen nombre de Ecuador en el concierto internacional.
El gobierno del presidente Guillermo Lasso, quien tiene una alta responsabilidad frente a los ecuatorianos y ante la opinión pública, ha sostenido a través de los ministerios de Gobierno y de Defensas que no conocen de casos de infiltración del narcotráfico ni de retiros de visas en directivos de altas esferas militares ni policiales, por lo que demandan de Estados Unidos y de la Embajada en Ecuador la entrega de información sobre el caso “narcogenerales” para iniciar investigaciones de rigor.
Si bien la participación de militares y policías en actos irregulares como del narcotráfico y de corrupción en Ecuador no es nada nuevo, en reiteradas ocasiones se ha anunciado detenciones de los miembros uniformados, lo nuevo según se ha dicho sería que quienes han sido detenidos y se encuentran pagando culpas en las cárceles, son militares y policías de bajo rango, pero nunca se había hablado como hasta ahora de “narcogenerales”, lo cual de ser cierto, podría poner en alto riesgo las estructuras del Estado como tal.
No se entendería como miembros de alto rango como generales de las dos instituciones militares y policiales quienes son las llamadas a regular la integridad del Estado democrático de derecho y justicia, para garantizar el orden público y la convivencia pacífica de todos los habitantes de la nación, se encuentren hoy en la retina del mundo, en el ojo del huracán, frente a las declaraciones de un embajador que por su alta responsabilidad, debe manejar con certeza este tipo de información sensible. Es necesario entonces que se continúe con las investigaciones hasta que este lamentable suceso de narcotráfico y corrupción sea aclarado para la salud política, económica, financiera y de transparencia del Ecuador.
Prof. Félix S. Pilay Toala
Doctor. Economista, Magister en Administración Pública.
Pontificia Universidad Católica del Ecuador sede Santo Domingo
Fpilay487@pucesd.edu.ec
