Según la información reportada por el mismo banco, se habrían filtrado datos que no comprometería el acceso a información como claves u otros que permitan acceso a patrimonio económico de sus clientes. Sin embargo, SERNAC ha solicitado a Banco Santander un informe completo que incluya detalles sobre cómo ocurrió el acceso no autorizado, qué datos fueron afectados, y a qué tipo de datos personales de los consumidores se tuvo acceso: correo electrónico, teléfono u otros.
Registros fueron descubiertos el pasado 14 de diciembre por el investigador de seguridad Bob Diachenko, que ha colaborado con Comparitech para hacer un análisis detallado.
En el texto requieren conocer las medidas que se han adoptado desde el 2018, con respecto a hechos de este tipo y el protocolo adoptado por este hecho en particular, además del procedimiento en general para este tipo de casos e informar si se están estudiando mejoras en las respuestas para los usuarios.
Se trata de una recopilación de contraseñas y direcciones de correo electrónico o nombres de usuario asociados, de diferentes servicios que ya hackeados entre 2016 y 2018
El oresidente del CPLT, Marcelo Drago, indicó que tras el reconocimiento de la responsabilidad de esta empresa en la filtración de datos personales de clientes de la banca “es deber de la empresa transparentar a la brevedad las medidas de seguridad que implementará para que esto no vuelva a ocurrir”.
Así lo consignó este lunes la compañía. “Sometemos a nuestros empleados a un alto estándar ético y cualquier persona que viole nuestro código se enfrenta a medidas disciplinarias, incluyendo el despido y posibles sanciones legales y penales”, dijo un portavoz de la firma.
La Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (ABIF) se refirió este martes al reconocimiento público que hizo Correos de Chile ayer respecto al origen de las filtraciones de datos de tarjetas de crédito ocurridos los días 25 de julio, 21, 27 de agosto y 6 de septiembre.
El organismo consignó además que las tarjetas vigentes afectadas ya fueron bloqueadas por los emisores”, añadiendo que “la banca continúa monitoreando la situación, para determinar la causa y los responsables de esta filtración de información.”
Un total de 426 tarjetas son las afectadas, de las cuales 21 corresponden a emisores extranjeros. 405 fueron chilenas, de 13 emisores nacionales, informó la Superintendencia de Bancos.
El imputado por cometer dos ciberataques fue traslado a tribunales esta mañana.
Se presume que la nueva filtración contiene el nombre de las personas involucradas, sus RUT y lo que sería un tipo de número de serie de cuentas de la entidad bancaria.
El organismo consignó este miércoles, eso sí, que una vez realizados los análisis preliminares, se puede indicar que la información filtrada no tiene la potencialidad de causar daño y las medidas preventivas de seguridad han sido adoptadas.
Los antecedentes liberados corresponden a una planilla Excel con información antigua, informó la entidad financiera.
El objetivo de esta acción, indicó la entidad, es obtener todos los antecedentes para iniciar una investigación sobre el real origen de la filtración y poder evaluar las acciones a seguir para defender los derechos de los consumidores.