Actualmente, los datos permiten observar que el IPC se está encaminando hacia su rango meta 2- 4% (fijado por el Banco Central). Durante el 2023, el IPC ha tendido a ajustarse, lentamente al principio de año y más rápido en junio recién pasado, con una tasa anualizada de 7,6%, lo que ha hecho que los salarios reales estén recuperándose, desde -2,2 noviembre 2022 a un valor positivo de 1,0 en mayo 2023, pero algo lejos aún de los niveles prepandemia y pre “estallido social” (2,8).
Estamos en una situación con tendencias contractivas en la actividad económica, aunque no tan recesiva como se pronosticaba a principios de año, sino más bien este año tendremos una economía estancada. En abril del presente año (último dato publicado a junio 2023), el índice de actividad económica, IMACEC, presentó una contracción de un 1,1% con respecto al mismo mes del año anterior. Corroboran la tendencia, las caídas de sectores como el comercio (-7,7%) y la industria (-2,5%), mientras que servicios crece 0,4 y la minería 3,1%.