​Más que un diagnóstico: cómo un entorno adaptado puede aliviar una urgencia infantil

|

3



En un sistema de salud nacional donde la sobrecarga y la falta de espacios especializados suelen ser la norma, contar con una sala pediátrica exclusiva no solo responde a una necesidad clínica, sino también a un enfoque de salud pública más humana y protectora de la infancia. Separar la atención infantil de los flujos generales de urgencia permite reducir traumas, evitar contagios y fortalecer el vínculo entre el sistema y las familias.


Bajo esta dimensión, el Servicio de Alta Resolución (SAR), ubicado en la calle General San Martín, cuenta con una sala exclusiva para urgencias pediátricas, pensada para entregar una atención más adecuada a los niños de la comuna. En esta sala pediátrica se atienden principalmente urgencias respiratorias, cuadros febriles, problemas gastrointestinales, traumatismos menores y otras patologías frecuentes en la infancia que requieren atención inmediata pero ambulatoria. El objetivo es ofrecer un entorno clínico más adecuado para resolver situaciones comunes sin exponer a los niños a ambientes de mayor complejidad.


El espacio considera una sala de espera especial para menores, y el equipo de salud trabaja con protocolos clínicos adaptados a este grupo. Además, los funcionarios han sido capacitados para atender a pacientes pediátricos, con el fin de reducir el impacto que puede generar una urgencia médica en la infancia.


Más de 2 mil niños


Actualmente, el SAR pediátrico atiende mensualmente en promedio a cerca de 2 mil niños, lo que refleja la alta demanda y la importancia de contar con un espacio separado para ellos.


La alcaldesa Isabel Valenzuela destacó la importancia de este enfoque: "Es fundamental mejorar las condiciones de atención en situaciones que pueden ser traumáticas para los niños. Tener un espacio diferenciado y un equipo preparado marca una diferencia en la calidad del servicio y en cómo enfrentar a los menores una urgencia médica", señaló.


El servicio también apoya a los padres o familiares que llegan con altos niveles de preocupación o estrés. El SAR cuenta con una psicóloga y un trabajador social, lo que permite abordar situaciones familiares más complejas y hacer derivaciones oportunas a otros centros de salud.


Desde el municipio se trabaja para replicar esta iniciativa en el SAPU Esmeralda, ampliando así el modelo de atención diferenciada a otros puntos de la comuna.


Con esta medida, Colina da un paso importante hacia una atención de salud más ordenada y especializada, entregando mejores condiciones para niños, niñas y sus familias en situaciones de urgencia.


2

1


europapress