¡Cuanto más oscura la noche, más brillan los astros!
Se dice que el momento de mayor oscuridad en la noche, es cuando se acerca el amanecer y que entre más oscura la noche, más brillan los astros.
Quizás estos comentarios no sean necesariamente verdades astronómicas, pero sirven para ejemplificar la oscuridad y desesperanza que a veces llegan a nuestras vidas y que parecen haber envuelto a nuestro país, ya que en muchos existe la sensación que estamos atravesando una noche muy oscura, con problemas graves de delincuencia, corrupción, homicidios, violencia, secuestros, narcotráfico, desconfianza en la conducción del país y niveles de inseguridad a los que no estábamos habituados, que generan temor.
Pero, aunque la noche pueda representar un período de aflicción, la luz de la mañana trae consigo esperanza y alegría, por eso en el libro de Juan (1:5), se nos dice que "la luz resplandece en las tinieblas, y las tinieblas no prevalecen contra ella", lo que enfatiza la victoria de la luz sobre la oscuridad.
En la Biblia, Jesús enseñó que incluso la luz más pequeña puede vencer la oscuridad más profunda. En el Sermón del Monte, dijo a sus seguidores: "Ustedes son la luz del mundo. Una ciudad en lo alto de una colina no puede esconderse. Ni se enciende una lámpara para cubrirla con un cajón. Por el contrario, se pone en la repisa para que alumbre a todos los que están en la casa,” (Mateo 5:14-15).
Esta metáfora ilustra que, aunque el mal y la oscuridad pueden parecer abrumadores, solo basta una pequeña luz para disipar la más densa oscuridad.
Juan David Quijano
