Desafíos y oportunidades desde los espacios para la transformación social
En un mundo cada vez más interconectado, el concepto de asociatividad se erige como un pilar fundamental para impulsar el cambio y la transformación en nuestra sociedad. Es en la colaboración y el trabajo conjunto donde encontramos el verdadero potencial para repensar nuestras ciudades y generar espacios que promuevan el bienestar, la confianza y la inclusión de todos sus habitantes.
Según el Censo de 2017, la comuna de Recoleta, municipio en el cual se ubica Fundación Mustakis, registró sus residentes en 157.851 habitantes; 75.906 mujeres y 72.314 hombres, que significan el 2,45% de la población total de la RM. Los jóvenes de 15 a 29 años son quienes ocupan la mayor parte, con 38.146 personas, secundados por el rango etario de 45 a 64 años, con 36.664. Además, según los datos municipales Recoleta es tres puntos más pobre que el resto del país y de acuerdo a su índice de Pobreza Multidimensional, que identifica carencias entre otras educacionales, de salud y calidad de vida, registra un 26,2%, siendo nuevamente superior al promedio regional y nacional, 15% y 16,6% respectivamente.
En este contexto Recoleta, es una comuna que encara desafíos significativos y relevantes en términos de oportunidades, acciones, medidas específicas y políticas públicas que mejoren las condiciones de vida de sus residentes y quiénes la visitan. Esto claramente demanda un enfoque integral y coordinado para abordar los desafíos socioeconómicos y culturales, y que, desde nuestra perspectiva, está estrechamente relacionado con la creación de espacios que fomenten la prosperidad integral y comunitaria al permitir la convergencia de su población.
En eso Recoleta ha sido cuna de posibilidades, convirtiéndose en uno de los lugares históricos de Chile reconocido por la diversidad cultural que han brindado sus ambientes al progreso de Santiago. Sus 16 km2 de superficie se ubican entre cerros, en un suelo hoy totalmente urbanizado, siendo el escenario del Camino del Inca, de La Vega, del barrio Patronato, del Mercado Tirso de Molina, el Regimiento Buin, el Cementerio General y un grupo de iglesias y conventos católicos.
De aquí surge la oportunidad para la Fundación Mustakis de trasladarse a Recoleta, como un vecino más que busca, por medio de colaboraciones y sinergias, ser un aporte tanto en lo educativo como en lo social al distrito que le circunda. Hemos buscado generar propuestas concretas con este enfoque, posicionándonos como una plataforma que reúne y amplía el ecosistema de organizaciones comprometidas con el desarrollo integral de las personas y la mejora de su entorno.
Nuestra historia con la comuna data de 2016, año donde primero establecimos nuestras oficinas y organizamos eventos comunitarios para conocer a nuestros vecinos. Luego lanzamos Kaos Espacio Creativo, un lugar diseñado para proporcionar experiencias de aprendizaje transformadoras para niñas, niños y jóvenes. Después inauguramos el HUB Mustakis, un punto de encuentro para emprendedores e innovadores sociales que ofrecen herramientas y proyectos de innovación educativa. Posteriormente, abrimos la Galería 420, con el objetivo de acercar el arte a nuestra comunidad y fomentar la conexión entre nosotros. Y ahora presentamos el nuevo Espacio 1179, una casa de 900 metros cuadrados reacondicionada para convertirla en un lugar para la sinergia y colaboración. Aquí se reúnen organizaciones sociales que trabajan en el Bienestar Territorial en diversas áreas, incluyendo infraestructura, desarrollo equitativo, alimentación y urbanismo táctico. Este espacio aspira a convertirse en un centro de creatividad, innovación y encuentro para las organizaciones que están redefiniendo estos territorios en beneficio de las personas, generando vínculos y contribuyendo al bien común.
De esta manera, queremos materializar nuestro compromiso con el desarrollo de las personas, proporcionando un espacio donde la creatividad y la innovación convergen para impulsar un cambio positivo en esta comuna y, desde aquí, al resto del país.
Domingo Errázuriz,
Director Ejecutivo de Fundación Mustakis
