La consultora británica Juniper Research estima que en 2027 el gasto en soluciones para la prevención y detección de fraudes financieros mediante Inteligencia Artificial superará los US $10.000 millones de dólares. Estos delitos aumentaron en pandemia; según la Asociación de Examinadores de Fraude Certificados (ACFE), principal y mayor organización de este tipo en el mundo, el incremento fue de 79% en 2020.
“Forbes indicó que 65% de los expertos en administración de finanzas espera cambios positivos del uso de inteligencia artificial en servicios financieros. Las herramientas tecnológicas están cada vez más avanzadas y, por lo mismo, resultan un apoyo importante para el orden, la vigilancia y el buen uso de los recursos”, comentan desde la empresa chilena ARTL Auditores.
El informe Global Fraud and Risk Report, elaborado por Kroll, proveedor mundial de servicios profesionales y productos digitales relacionados con la valoración, la gobernanza, el riesgo y la transparencia, informó que el 82% de los directivos de multinacionales reconoce que sus organizaciones se han visto afectadas de forma significativa por actividades ilícitas, fraude, corrupción, blanqueo de capitales u otras conductas irregulares graves.
La importancia de las auditorías externas
El fraude contable es un delito grave y ocurre tras una manipulación de parte de personas o empresas que, alternando estados financieros, obtienen beneficios desconocidos y propios. “Generalmente, muestran una imagen financiera falsa o distorsionada de una empresa, ocultan pérdidas o deudas, aumentan artificialmente ingresos, beneficios o activos, o bien, disminuyen pasivos, entre otros propósitos”, explican los expertos.
“Estos fraudes, que pueden ser menores o limitados, involucrar grandes o pequeñas empresas, perjudicarán siempre la reputación y estabilidad financiera de una empresa. Para mitigarlos hay que contar con sistemas de control interno sólidos, una adecuada supervisión y una cultura empresarial ética y la transparente”, añaden.
En ARTL Auditores indican que si bien las auditorías externas no tienen como fin la detección de fraude, su aporte en ello es crítico: dentro del proceso de control interno se puede llegar a identificar omisiones deliberadas, falsificación, colusión o elusión dentro de una compañía. Por lo mismo, los profesionales entregan consejos claves para prevenir fraudes contables.
“Lo primero es realizar conteos físicos de inventarios y en caso de faltar algo, iniciar una auditoría forense de inmediato. Por otro lado, los accesos a las cuentas bancarias deben limitarse; es decir, tenerlos solo las personas indicadas, incluyendo controles cruzados y doble firma por ejemplo. Es recomendable también cambiar con frecuencia las claves de cuentas y registros de login; igualmente, elaborar mensualmente conciliaciones bancarias, implementar un modelo de prevención de delitos es clave”, puntualizan.