Según informó la organización Clean Clothes Campaign en 2019, a nivel mundial 3 de cada 5 prendas de fast fashion acaban en vertederos, generando un impacto negativo para el medio ambiente.
El cuidado del medioambiente es fundamental por un sinfín de razones, y parece que las marcas de ropa de todo el mundo están poniendo su grano de arena para que el planeta se mantenga saludable por más tiempo.
La compañía, que tiene 800 tiendas en todo el mundo, se ha enfrentado a una crisis de efectivo y se está preparando para una declaración de quiebra, informó recientemente The Wall Street Journal. La cadena saldrá de la mayoría de los mercados de Asia y Europa, pero seguirá operando en América Latina.