MADRID, 15 Dic. (EUROPA PRESS) - La Premio Nobel de la Paz iraní Narges Mohammadi ha denunciado que fue ingresada en el hospital hasta en dos ocasiones debido a las palizas que las fuerzas de seguridad le propinaron durante su arresto el pasado viernes durante un acto en memoria del abogado Josrou Alikordi, según ha indicado este lunes su familia.
Mohammadi, que realizó una breve llamada telefónica en la víspera con su familia tras casi tres días sin información sobre su paradero, ha asegurado que "fue atacada por agentes vestidos de civil con fuertes y repetidos golpes con porras en la cabeza y el cuello".
"Declaró en la llamada que la intensidad de los golpes fue tan fuerte, contundente y repetida que fue trasladada a urgencias en hasta dos ocasiones", ha dicho en un comunicado la Fundación Narges, que ha agregado que las fuerzas de seguridad la llegaron a amenazar de muerte con frases como 'Haremos que tu madre se ponga de luto' .
Mohammadi, que habría pedido a su equipo legal que presente "de inmediato" una denuncia formal contra las fuerzas de seguridad por los actos de "violencia" durante su arresto, ha sido acusada presuntamente de "cooperar con el Gobierno israelí".
La activista iraní ha informado a su familia que "no se le ha dado ninguna explicación" con respecto a su detención y que desconoce "qué autoridad la mantiene retenida". "Su estado físico en el momento de la llamada no parecía bueno", ha agregado.
La Fundación Narges ya denunció durante el fin de semana "palizas, insultos y obscenidades" durante la detención de Mohammadi --condenada a nivel internacional-- en el acto en memoria del abogado Josrou Alikordi, que falleció hace unas semanas en "extrañas circunstancias".
Al menos 39 personas fueron detenidas durante el acto, según confirmó la Fiscalía de la ciudad iraní de Mashhad. Entre los arrestados, además de la Premio Nobel de la Paz, estaría el hermano de Alikordi, Yavad Alikordi.
La detención de Mohammadi y de otros activistas ha sido condenada por figuras como la también Nobel iraní Shirin Ebadi, el Comité Noruego del Nobel, el preso político Ahmad Reza Haeri o el heredero del trono iraní, Reza Pahlaví. También ha condenado el arresto la flamante Nobel de la Paz 2025, la venezolana María Corina Machado.
Mohammadi fue puesta en libertad provisional en diciembre de 2024 a raíz de una solicitud por motivos médicos aprobada por la Fiscalía de Teherán. Meses antes, en octubre, fue hospitalizada después de que su familia denunciara que las autoridades iraníes llevaban más de dos meses impidiendo que recibiera tratamiento pese al deterioro de su estado de salud.
Desde que fuera puesta en libertad temporal, su círculo cercano ha advertido de que corría el riesgo de ser enviada nuevamente a la cárcel. La activista, que ha pasado la mayor parte de los últimos 20 años de su vida entre rejas, ha sufrido múltiples infartos y fue sometida a una cirugía de emergencia en 2022.
Mohammadi ha sido condenada hasta en cinco ocasiones hasta acumular una pena total de 31 años de cárcel, fundamentalmente por su papel en las protestas contra el estricto código de vestimenta en Irán. La activista ha mostrado su apoyo en reiteradas ocasiones a las manifestaciones antigubernamentales por la muerte de Mahsa Amini.