MADRID, 3 Jul. (EUROPA PRESS) - El Kremlin ha afirmado este jueves que la decisión de Estados Unidos de suspender parte de las entregas de armas a Ucrania deriva de "problemas" en la producción "en las cantidades requeridas" para hacer frente a la presión de las tropas rusas en el marco de la invasión desatada en febrero de 2022 por orden del presidente de Rusia, Vladimir Putin.
"Aparentemente, la industria (estadounidense) no tiene tiempo para producir misiles en la cantidad requerida, especialmente desde que obviamente ha habido muchas entregas a Israel", ha dicho el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, quien ha señalado que "hay problemas en este sentido" en la cadena de producción.
"Estamos supervisando la situación, muy de cerca", ha especificado, antes de reiterar que "cuantos menos misiles lleguen a Ucrania desde el extranjero, más cerca estará el fin de la operación militar especial", un argumento que ya empleó durante la jornada del miércoles, según ha recogido la agencia rusa de noticias TASS.
El Pentágono ha enmarcado la suspensión en una "revisión de capacidades" para evitar carencias en el arsenal a disposición de Washington o de otros aliados, si bien la Administración de Donald Trump insiste en su compromiso con la seguridad ucraniana, después de que Kiev convocara el miércoles al encargado de negocios estadounidense para advertir de que cualquier posible retraso o cancelación en el envío de armas sólo servirá para "alentar al agresor" a "continuar con la guerra y el terrorismo".