MADRID 18 Jun. (EUROPA PRESS) - Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han alcanzado dentro de sus últimas olas de ataques sobre Irán al menos dos plantas que sirven para el proceso de fabricación de las máquinas centrifugadoras utilizadas en la industria nuclear para elevar la pureza del uranio, según el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA).
La agencia ha confirmado en un nuevo informe que tiene "información" relativa a impactos en el Centro de Investigación de Teherán, en concreto en un edificio donde se producen y prueban rotores para centrifugadoras. Además, otros dos edificios utilizados igualmente en tareas de fabricación de componentes han quedado destruidos en Karaj, a las afueras de la capital.
El OIEA ha explicado que se trata en ambos casos de instalaciones que quedaron sujetas a la supervisión de observadores externos dentro del acuerdo nuclear suscrito en 2015 y del que Estados Unidos se desmarcó de manera unilateral en el año 2018, durante el primer mandato del magnate republicano Donald Trump.
El Ejército israelí no oculta que uno de sus grandes objetivos en esta cadena de bombardeos que inició el viernes son las instalaciones vinculadas a la industria atómica iraní y este mismo martes ya había confirmado un ataque sobre un centro de Teherán destinado a aumentar el "enriquecimiento de uranio con el fin de desarrollar armas nucleares".
Dentro de estos ataques, también ha bombardeado instalaciones nucleares como la de Natanz, lo que ha provocado daños tanto en la parte externa de la planta como también en instalaciones subterráneas con centrifugadoras, según los análisis preliminares realizados por el OIEA, que ha advertido del riesgo de este tipo de operaciones.