La reciente muerte de Horst Paulmann, fundador de Cencosud y una de las figuras empresariales más influyentes en Chile, reabre la conversación sobre el desafío de la sucesión en empresas familiares. En un país donde muchas de las grandes compañías aún están en manos de sus creadores, la planificación del traspaso generacional es clave para la sostenibilidad del negocio. ¿Cómo enfrentan las empresas familiares chilenas este proceso?
El ciclo de vida de estas compañías suele estar marcado por la figura del fundador, quien imprime su visión, impulsa el crecimiento y, en muchos casos, concentra la toma de decisiones. Sin embargo, a medida que los líderes envejecen, surge la necesidad de institucionalizar la gestión, definir el rol de las nuevas generaciones y, en algunos casos, abrir la empresa al mercado de capitales.
Salir a la bolsa puede ser una estrategia para profesionalizar la compañía y garantizar su continuidad más allá de la familia. Empresas como Cencosud han utilizado este mecanismo para financiar su expansión, aunque no todas las compañías familiares ven esta opción como una alternativa viable. Muchas prefieren mantener el control en manos de la familia, lo que puede dificultar la transición si no existe una planificación clara del relevo generacional.
La incorporación de las nuevas generaciones es otro punto crítico. No basta con que los herederos tengan el apellido correcto; es fundamental que se preparen adecuadamente, acumulen experiencia fuera del negocio familiar y demuestren capacidad de liderazgo. En algunos casos, la mejor decisión puede ser delegar la gestión en ejecutivos externos, asegurando un gobierno corporativo sólido y equilibrado.
Por otro lado, la salida de los fundadores suele ser un proceso complejo, tanto emocional como estructuralmente. Dejar el mando no es fácil para quienes han dedicado su vida a la empresa, y en muchos casos, la resistencia a soltar el control genera conflictos internos que pueden afectar la estabilidad del negocio. Diseñar un plan de sucesión con tiempos y etapas claras, así como establecer un consejo de administración robusto, puede facilitar esta transición y minimizar riesgos.
El caso de Horst Paulmann es un reflejo de estos desafíos. Su legado en Cencosud es innegable, pero también ha sido un proceso de sucesión que ha enfrentado desafíos y ajustes en la dirección. Para las empresas familiares chilenas, la clave está en anticiparse, planificar y profesionalizar la gestión del traspaso, asegurando que el crecimiento y la visión del fundador perduren más allá de su liderazgo.