En la tarde del día viernes, el presidente de la compañía, Javier Martínez, recibió una llamada de parte de Henry Comber, integrante de la Comisión de Acreedores de Enjoy, quien le informó que los principales acreedores de firma y futuros accionistas, habrían llegado a un acuerdo con el grupo operador de casinos Sun Dreams para fusionarla con Enjoy y que ya existía un banco de inversión contratado y asesorándolos en esta operación.
Concretó la compra del 65% del total de las acciones emitidas por la compañía, hasta ahora, propiedad de Sun Latam.
De manera transitoria, la Sociedad se obligará a mantener su Deuda Financiera Neta hasta un determinado monto y a cumplir con un capital social mínimo.
Informó hoy en carácter de hecho esencial.
La sociedad ha contratado la asesoría financiera de LarraínVial.
Consignó este viernes en calidad de hecho esencial.
Así lo informó Enjoy a través de un hecho esencial.
Las partes se mantenían negociando con el objeto de alcanzar los acuerdos necesarios respecto a los términos y condiciones que permitieran la eventual fusión.
El proyecto se encontraba detenido en sus obras a consecuencia de las acciones judiciales interpuestas por la empresa Sun Dreams destinadas a revertir su adjudicación en favor de Enjoy.
“Las partes no han alcanzado aún un acuerdo total sobre la documentación definitiva en los términos propuestos inicialmente en el MOU para la Transacción”, consignó la compañía a través de un hecho esencial.
El precio total de la operación -que se materializaría en el mes de julio- asciende a US$24,8 millones, el cual puede aumentar hasta un máximo de US$27,8 millones dependiendo del resultado operacional en el ejercicio 2018 de la empresa adquirida.
La operadora conservó la administración de los casinos de Viña del Mar, Coquimbo y Pucón, y ganó la plaza de Puerto Natales, hasta ahora de Sun Dreams.
La compañía experimentó menor crecimiento del Ebitda en comparación a los ingresos, lo que se debió, mayoritariamente, a una disminución en el resultado operacional de su principal activo, Sun Monticello (producto del siniestro ocurrido en julio de 2017), a lo que se sumaron resultados deficitarios en las filiales de Colombia y Panamá (que se encuentran en proceso de rentabilización).