A través de encuentros y diálogos con la sociedad civil y la infancia, se logró aportar una perspectiva valiosa para asegurar que las voces de los más jóvenes, especialmente de aquellos en situación de vulnerabilidad, fueran escuchadas y consideradas en la formulación de esta política.
En efecto, la IA es una tecnología extremadamente poderosa que puede ser muy beneficiosa si se utiliza de la manera adecuada, por ejemplo, en la automatización de procesos, porque permite a las empresas, entre tantos usos, reducir el tiempo manual dedicado a las tareas repetitivas y disminuir los errores humanos, mejorando y optimizando los flujos de trabajo.
Estos pasos necesarios han sido presionados por los eventos de los últimos años, pandemia mediante, que han hecho que la PNCE se profundice y releve en importancia al interior de los establecimientos educacionales, donde aún persiste una cultura de resistencia a los cambios, incluso post conflictos por todos conocidos.