Hay varios caminos para abordar estos retos, uno de ellos es cómo las organizaciones preparan a sus trabajadores con las habilidades del futuro, otro tiene que ver en cómo se planifica de mejor forma la fuerza laboral.
En un ámbito del trabajo en permanente evolución y cambio, contar con la capacidad de adaptarse y mantenerse vigente profesionalmente resulta crucial para desarrollar una carrera exitosa.
En los últimos años, hemos sido testigos de un rápido avance tecnológico que ha transformado la manera en que trabajamos. La llegada de nuevas tecnologías ha creado oportunidades para mejorar la eficiencia, aumentar la productividad y modificar industrias enteras. Especialmente, las áreas de Recursos Humanos, cuya gestión ha representado desafíos diversos en la actualidad, siendo uno de los principales el impulsar la productividad, ante los cambios que se avecinan, como la reducción de la jornada laboral a 40 horas semanales.
Cuatro son las generaciones que actualmente conviven en el mundo laboral, Baby Boomers, X, Millennials y Z, cada una con diferentes intereses, puntos de vista, comportamientos y formas de relacionarse, de acuerdo con su edad, el contexto histórico y los valores con los que han crecido, convirtiéndose en un permanente desafío para las empresas, las que deben gestionar las diferencias, facilitar la convivencia y motivar el trabajo en equipo para lograr mayores niveles de compromiso, satisfacción laboral y alcanzar los objetivos de la organización