¿Actuar bien porque hay una sanción al no hacerlo o simplemente porque es lo que corresponde? Estas son dos caras de la moneda que definen nuestros patrones de comportamiento y que, además, debiese ser el sustento básico de los gobiernos corporativos al interior de las empresas. ¿Por qué son importantes los reglamentos de compliance o las disposiciones de los gobiernos corporativos dentro de las culturas organizacionales? Hay muchas respuestas, pero la más usual se relaciona con que es relevante y casi un deber cumplir los ordenamientos que dispone la organización que las personas representan.