Mediante una circular enviada a sus clientes, Banco Edwards, filial del Banco de Chile, se refiere al incidente de seguridad informática que afectó a los sistemas de la entidad bancaria.
Esto luego de conocerse que el ataque informático habría sido un distractor para efectuar un robo que Banco de Chile reconoce en US$10 millones que salieron de sus arcas, pero que según versiones extraoficiales sería mucho mayor y que el monto reconocido sólo responde a lo que el banco ha podido recuperar.