El Año Nuevo es una de las celebraciones más esperadas por los chilenos, marcada por comidas especiales, cenas y reuniones familiares o con amigos. En este contexto, la Asociación Industrial de Laboratorios Farmacéuticos A.G. (Asilfa) entrega una serie de recomendaciones para cuidar la salud, tanto en relación con el consumo de alcohol y su interacción con ciertos medicamentos.
“Cuando una persona está tomando medicamentos, el alcohol está contraindicado. Incluso una sola copa puede generar efectos secundarios peligrosos”, advierte Patricio Huenchuñir, vicepresidente ejecutivo de Asilfa. “Además, en estas fechas, en que aumentan los viajes y desplazamientos, es fundamental asegurar que los medicamentos se transporten de manera adecuada, evitando riesgos para los tratamientos”.
Alcohol y medicamentos: una mezcla peligrosa
La combinación de fármacos y alcohol nunca ha sido aconsejable, ya que ambos son metabolizados por el hígado, lo que puede provocar reacciones adversas como náuseas, vómitos, mareos, somnolencia extrema o, en casos graves, hemorragias internas, arritmias y hasta la muerte.
Entre los medicamentos de mayor riesgo al mezclarse con alcohol se encuentran:
Antihipertensivos: pueden causar desmayos o arritmias.
Analgésicos potentes, sedantes y medicamentos para dormir: aumentan el riesgo de depresión respiratoria y pérdida de la conciencia.
Anticoagulantes: la mezcla puede desencadenar hemorragias o coágulos.
Antibióticos y medicamentos para la diabetes: generan efectos secundarios como dolor de estómago, cambios en la presión arterial o descensos peligrosos en el azúcar en sangre.
“Asilfa recomienda abstenerse de beber alcohol cuando se están tomando medicamentos y, ante cualquier duda, consultar siempre al médico tratante”, enfatiza Huenchuñir.
¿Qué pasa con el traslado y conservación de medicamentos?
Durante estas celebraciones, muchas familias se trasladan fuera de sus hogares, lo que hace necesario tener especial cuidado en el transporte de los fármacos:
Mantener siempre los medicamentos en sus envases originales y con la rotulación visible.
No dejarlos expuestos al sol ni dentro de automóviles cerrados, ya que el calor puede alterar su efectividad.
Usar bolsos de mano o coolers portátiles para medicamentos que requieren refrigeración.
Transportar solo las dosis necesarias si el viaje es corto, y en caso de tratamientos crónicos, llevar siempre un respaldo.
Respetar las fechas de vencimiento y nunca automedicarse.
“Disfrutemos esta fiesta con alegría y autocuidado. Prevenir problemas de salud pasa tanto por evitar el consumo de alcohol cuando estamos medicados como por mantener los tratamientos en condiciones seguras”, concluye Huenchuñir.