La tecnología ya no es solo eficiencia o productividad: hoy tiene el potencial de transformar vidas, reducir brechas y generar un impacto social real. En SoftServe creemos que la innovación cobra verdadero valor cuando mejora la vida de las personas y contribuye al desarrollo sostenible.
Las grandes compañías tecnológicas tenemos una responsabilidad que va más allá de lo comercial. La sociedad espera que enfrentemos desafíos urgentes como la desigualdad, el acceso a servicios básicos o la crisis climática. Y esto también impacta positivamente al interior de las organizaciones: según Deloitte, el 73% de las empresas que integran criterios de sostenibilidad en su estrategia tecnológica mejoran su innovación y retención de talento.
Los proyectos con propósito, como los que abordan salud mental, educación o cambio climático, están ganando protagonismo. En paralelo, es esencial seguir impulsando la equidad de género en áreas STEM, asegurando entornos diversos e inclusivos.
Chile tiene el talento y la creatividad para liderar la innovación con sentido. Lo que falta es decisión.
Desde SoftServe, reafirmamos nuestro compromiso con una tecnología que sea sinónimo de empatía, equidad y sostenibilidad. Nuestro fondo de caridad “Open Eyes” es prueba concreta de que sí es posible innovar con propósito: proveer ayuda sistemática y global para quienes lo necesitan articulando proyectos y actividades globales y/o regionales que den respuesta a necesidades específicas en las comunidades o grupo humanos más vulnerables.
Estos proyectos no solo responden a necesidades reales, sino que también demuestran que es posible hacer tecnología con una mirada social. Apostar por esta ruta no es solo una elección ética: es una estrategia de futuro.
Por Daniel Rojas, Brand & CSR Specialist SoftServe