Las autoridades de Estados Unidos han anulado este jueves una alerta de tsunami emitida horas antes tras un terremoto de magnitud 8,2 en la escala abierta de Richter frente a las costas de Alaska, sin que haya informaciones sobre víctimas.
Los equipos de rescate usaban maquinaria pesada y sus propias manos para buscar víctimas.
La policía hizo disparos de advertencia y lanzó gases lacrimógenos para dispersar a la gente que saqueaba comercios en Palu, una ciudad costera destrozada por el temblor de 7,5 grados de magnitud y el tsunami que le siguió el pasado viernes
Las autoridades de Indonesia comenzarán este lunes a enterrar en una fosa común a centenares de muertos causados por el terremoto seguido de un tsunami que sacudió el viernes la isla de Célebes, mientras sigue la búsqueda de víctimas y supervivientes