La Comisión Europea ha iniciado una investigación en profundidad para determinar si la tecnológica china especializada en seguridad Nuctech recibió subsidios de Pekín para competir con una ventaja ilegal en el sector de los sistemas de amenaza --como los escáneres que se instalan en los controles de aeropuertos y puertos-- en la Unión Europea.
El caso, en el marco del reglamento europeo sobre subvenciones extranjeras (FSR, por sus siglas en inglés), examinará la actividad de la empresa en la prestación de servicios para la producción y venta de sistemas de detección de amenazas y trata de aclarar si recibió ayudas irregulares como ventajas fiscales o financiación preferencial en forma de préstamos.
Según ha informado el Ejecutivo comunitario en un comunicado, sus expertos albergan dudas sobre la posibilidad de que con estos apoyos de un Estado tercero, la compañía haya mejorado su posición competitiva en el mercado interior y afectado negativamente a la competencia.
Por ejemplo, Bruselas apunta que Nuctech llegó a ofrecer precios y condiciones en licitaciones a las que se presentó en Europa que otros operadores del Mercado Único no podrían igualar "razonablemente" para asegurar el suministro de los grandes volúmenes de esos sistemas de alerta y garantizar los servicios relacionados con estos productos.
"Los sistemas de detección desempeñan un papel esencial para garantizar una Europa abierta y segura", ha defendido en un comunicado la vicepresidenta del Ejecutivo comunitario responsable de Competencia, Teresa Ribera, que también ha puesto el acento en la necesidad de garantizar "igualdad de condiciones" en el mercado común.