MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) - La Dirección General de Ordenación del Juego (DGOJ), integrada dentro del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, ha anunciado este viernes un nuevo algoritmo basado en microdatos reales para identificar conductas adictivas con el objetivo de detectar patrones de juego problemático.
Según ha informado el departamento de Pablo Bustinduy, Consumo lleva tiempo trabajando sobre el algoritmo que se ha presentado durante el I Congreso Internacional de Juego celebrado en la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre de Madrid.
El secretario general de Consumo y Juego, Andrés Barragán, ha subrayado la importancia de aplicar la tecnología al servicio del bienestar social y ha definido este algoritmo como "una herramienta revolucionaria, tanto en la concepción de desarrollo de políticas públicas basadas en la evidencia científica, como en los positivos efectos que sin duda va a tener para la protección de las personas con riesgo de juego problemático y sus familias".
En concreto, el Ministerio ha detallado que el mecanismo toma como referencia para su configuración y diseño los microdatos que reflejan el comportamiento real en las plataformas de juego de personas diagnosticadas médicamente con trastorno de juego, pasando a modelizar los mismos para poder identificar el riesgo de juego problemático de personas que juegan online.
MECANISMO "PIONERO"
Consumo ha indicado que se trata de un "mecanismo pionero" en materia de detección precoz ya que, hasta ahora, estos mecanismos son desarrollados por cada operador de forma autónoma, "no existiendo ni herramientas ni datos homogéneos sobre la eficacia de los mismos, lo que hace que la detección media sea de entorno al 3% de las personas que juegan".
Según sus cálculos, esta herramienta aumentaría hasta en 10 puntos los porcentajes de detección actuales, tanto por "la eficacia del modelo, al basarse en microdatos reales, como por la capacidad de homogeneizar los mecanismos de detección de riesgo que deben usar los operadores".
Finalmente, ha aclarado que la herramienta continúa con el procedimiento normativo habitual que implicará la obligación de su uso para todos los operadores de juego. Este mecanismo de detección estaba previsto en el Real Decreto 176/2023, de 14 de marzo, por el que se desarrollan entornos de juego más seguros, en el que ya se venía obligando a los operadores a adoptar mecanismos de detección de comportamientos de riesgo en el juego online, así como a adoptar medidas de protección hacia los jugadores.