Este cambio en los prefijos apunta directo al corazón del problema: la desconfianza. Ahora, el cliente puede identificar de inmediato si la llamada es comercial, y asumir que viene de una fuente verificada.
Estudio de la consultora BBK Group en conjunto con Criteria midió temáticas como confianza en las compras online y fidelidad de clientes con marcas.