En efecto, la IA es una tecnología extremadamente poderosa que puede ser muy beneficiosa si se utiliza de la manera adecuada, por ejemplo, en la automatización de procesos, porque permite a las empresas, entre tantos usos, reducir el tiempo manual dedicado a las tareas repetitivas y disminuir los errores humanos, mejorando y optimizando los flujos de trabajo.
De acuerdo a datos del Servicio de Impuestos Internos, más de 320 mil contribuyentes están inscritos para emitir boleta electrónica, de los cuales 76,2% son microempresas y 19,7% pequeñas empresas. Un paso más en la digitalización tan necesaria para todas ellas.