Ante la drástica disminución de la demanda, las empresas hoteleras analizadas han debido innovar, digitalizando las ventas y aumentando su visibilidad; implementar tecnología en la gestión de procesos clave, e incorporarla como factor estándar para ser competitivo en la industria. Asimismo, tuvieron que considerar los problemas o barreras que enfrentan y modificar sus modelos de negocio, para mantener las operaciones y puestos de trabajo.