Chile enfrenta una paradoja alimentaria. Pese a contar con una extensa costa y una alta producción pesquera, el consumo de pescado en el país sigue siendo bajo. Según cifras de la FAO, los chilenos consumen en promedio 15,8 kilos de pescado al año, por debajo de los 20 kilos recomendados.
Esta es una enfermedad que se caracteriza por la pérdida de densidad y calidad del tejido óseo, que aumenta considerablemente el riesgo de caídas y fracturas entre quienes lo padecen. Si bien su incidencia está asociada al envejecimiento, esta es una afección que puede ser provocada por otras patologías o factores como la menopausia temprana o el uso de ciertos fármacos.