El gran peso de esta bomba, superior a las 13 toneladas, hace que sólo sea soportable por los bombarderos B-2, a los que las fuerzas estadounidenses finalmente han recurrido para intentar provocar daños en varias instalaciones.
"Estados Unidos está comprometido con la seguridad de Israel y es vital para los intereses nacionales de EEUU ayudar a Israel a desarrollar y mantener una capacidad de autodefensa fuerte y preparada", ha resaltado este viernes la Agencia de Cooperación para la Seguridad de la Defensa en un comunicado.
Ello, mientras se intensifica la búsqueda del responsable del envío de paquetes sospechosos a destacados demócratas y a CNN.