“Las perspectivas económicas mundiales están rodeadas de gran incertidumbre, vinculada principalmente con la trayectoria de la pandemia. La contracción de la actividad ocurrida en 2020 no tiene precedentes históricos recientes en términos de su velocidad y sincronicidad. Pero podría haber sido mucho peor”, señaló el organismo en su Informe de Perspectivas de la economía Mundial de abril.