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Miguel Brunaud R. |
Tras el Dictamen N.º1283/006 de 26 de marzo emanado por la Directora Subrogante de la Dirección del Trabajo Sra. Camila Jordán, demasiado ha sido el revuelo, lo que demuestra que no se entendió ni lo literal ni el espíritu, en ambos casos correctos, que contenía dicho Dictamen.
Resulta complejo hablar de una reducción de la jornada laboral en Chile cuando la actividad económica está débil, en vías de recuperación de las nefastas reformas del segundo gobierno de Michelle Bachelet y las malas proyecciones por el incierto panorama internacional.