Los operadores no paran de desplegar nuevas antenas para mejorar la cobertura de las redes móviles para ir extendiendo el uso del 4G y dentro de poco del 5G. Parte de esos datos se los daba la propia Google, pero ahora la compañía ha decidido cortarles el grifo a los operadores, que ahora tendrán que hacer los despliegues más a ciegas.