Destaca la reducción del consumo de energía, uso de energía renovable, reutilización de agua generada por condensación para riego, entre otros.
La certificación LEED, que busca acreditar el uso de energía y agua de forma sustentable durante la construcción de obras, es una alternativa para ayudar a ese objetivo. Lo mismo ocurre con la creación de espacios verdes en las áreas de trabajo.