MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha destacado que los nuevos casos de tuberculosis han descendido por primera vez desde la pandemia de Covid-19, pero ha aseverado que esta enfermedad causó más de 1,23 millones de muertes en 2024, lo que ha calificado de "inconcebible para una enfermedad que se puede prevenir y curar".
Adhanom ha comentado en una rueda de prensa 'online' los principales resultados del Informe Mundial de la Tuberculosis, publicado este miércoles por la OMS. Según recoge, el año pasado se notificaron 10,7 millones de infecciones, lo que supone un leve descenso del uno por ciento con respecto a los 10,8 millones de nuevos casos de 2023. Aun así, cabe destacar que el número de personas afectadas sigue por encima de los niveles prepandemia, teniendo en cuenta que en 2020 se registraron 10,3 millones de casos.
En cuanto a los fallecimientos por esta causa, la cifra estimada supone el tercer descenso anual consecutivo, tras el retroceso que se sufrió en este sentido como consecuencia de las interrupciones en atención provocadas por la Covid-19. De las 1,23 millones de muertes en 2024, 1,08 millones fueron entre personas VIH negativas y 150.000 entre personas con VIH. Así, supone una reducción del 42 por ciento respecto a los 2,13 millones de defunciones en 2010.
Entre los avances logrados, el informe muestra que, en 2024, 8,3 millones de personas fueron diagnosticadas con tuberculosis y accedieron al tratamiento, lo que representa aproximadamente el 78 por ciento de las personas que contrajeron la enfermedad durante ese año. Además, la cobertura de las pruebas rápidas para el diagnóstico aumentó del 48 por ciento en 2023 al 54 por ciento en 2024.
Asimismo, el tratamiento para la tuberculosis sensible a los medicamentos siguió siendo altamente eficaz, con una tasa de éxito del 88 por ciento; el número de personas que desarrollan tuberculosis resistente al tratamiento ha continuado su descenso iniciado en 2015, con una cifra estimada de 390.000 casos en 2024; la tasa de éxito del tratamiento ha ascendido hasta el 71 por ciento; y 5,3 millones de personas con alto riesgo de infección recibieron tratamiento preventivo, frente a los 4,7 millones de 2023.
"El número de personas que se someten a pruebas y reciben tratamiento está aumentando, y la investigación avanza. Por primera vez en más de un siglo, se dispone de nuevas vacunas eficaces contra la tuberculosis para adolescentes y adultos. Actualmente hay al menos 18 vacunas candidatas en fase de desarrollo clínico, incluidas seis en ensayos de fase III", ha señalado Adhanom.
Entre las regiones de la OMS que han conseguido un mayor progreso se encuentran la Región de África, que ha logrado reducir la tasa de incidencia en un 28 por ciento y las muertes en un 46 por ciento entre 2015 y 2024, y la Región de Europa, donde los descensos alcanzaron el 39 por ciento en incidencia y el 49 por ciento en muertes.
AVANCES INFERIORES AL OBJETIVO PARA 2030
Aun así, el informe concluye que los avances en la reducción de la carga de la enfermedad están "muy por debajo" de los objetivos fijados para 2030 en la mayor parte del mundo. Los Estados miembro de la OMS y de la Organización de Naciones Unidas (ONU) se comprometieron a poner fin a la tuberculosis en 2030 con una reducción del 90 por ciento en el número de muertes y del 80 por ciento en la tasa de incidencia en comparación con los niveles de 2015.
En este sentido, el director general de la OMS ha alertado de que los recortes en la financiación de la ayuda internacional destinada a muchos países de ingresos bajos y medios amenazan con revertir los logros obtenidos hasta la actualidad, en referencia por ejemplo a los recortes anunciados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
El informe incluye una previsión de cómo podrían afectar las reducciones de la financiación norteamericana en la laucha contra la tuberculosis. Si no se restablece la ayuda, señala que pueden tener lugar dos millones de muertes y 10 millones de casos adicionales en el periodo 2025-2030.
Por ello, la OMS ha reclamado el compromiso de todos los países para seguir avanzando frente a esta enfermedad y Adhanom ha instado a los Estados a aumentar la asignación de recursos nacionales a este respecto, así como la financiación internacional.
"Tenemos muy buenos ejemplos en más de 100 países que lograron reducir la incidencia de la tuberculosis en al menos un 20 por ciento y más de 65 países redujeron la mortalidad por tuberculosis en un 35 por ciento. Esto pone de relieve que es posible acabar con esta enfermedad centenaria", ha resaltado por su parte la directora del Departamento de VIH, Tuberculosis, Hepatitis e ITS de la OMS, Tereza Kasaeva, acerca de los avances que se pueden lograr con el apoyo adecuado.