​BICE Inversiones por IPC: instrumentos en UF ganan atractivo

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El Departamento de Estudios de BICE Inversiones comentó este martes los alcances del ascenso de 0,1% presentado por la inflación en agosto. El IPC, apuntó la entidad, “estuvo en línea con nuestras estimaciones.” A pesar de lo anterior, la inflación en términos anuales retrocedió a un nivel de 2,4%, desde el nivel de 2,5% mostrado en julio.

De acuerdo a la institución privada, “en el detalle, ocho de las nueve divisiones que componen el índice registraron variaciones positivas. Destacaron las alzas en las divisiones de vestuario y calzado, en especial en productos como zapatos y otros calzados (4,1%), y la de alimentos y bebidas no alcohólicas , donde las carnes presentaron un alza de 0,8%. Por otra parte, la división de transporte registró la baja más relevante, donde destacó el descenso de 2,8% en la gasolina. Es importante destacar que desde mediados de agosto los combustibles empezar a registrar alzas, las que se verán reflejadas en el registro de septiembre.”

Con respecto a la inflación que excluye a los precios más volátiles (IPC SAE) y que puede estar más vinculada a la evolución de economía, tuvo una variación más alta de 0,2%, lo que en términos anuales la ubica en un nivel de 1,9%, mostrando posibles efectos del desconfinamiento y un mayor consumo de las personas, gracias a un aumento en su ingreso disponible (transferencias del gobierno y retiro de fondos de las AFP).

“Es relevante destacar que en esta medición aún se observa un nivel de imputación de precios cercano al 27% (el promedio histórico es de 10%), esto debido a la mayor dificultad en el levantamiento de precios que realiza el INE producto de las restricciones sanitarias como la cuarentena, lo que podría disminuir la precisión en la medición. En términos de perspectivas de corto plazo, proyectamos registros cercanos a 0,3% para septiembre y octubre, donde incidirían alzas en las divisiones de alimentos, especialmente perecibles como las frutas y verduras, y transporte, donde los combustibles empezar a registrar alzas. Además, continúan los efectos rezagados de un tipo de cambio más alto y el proceso de desconfinamiento en distintas regiones del país”, consignó BICE Inversiones.


Proyecciones y recomendaciones


De esta forma, la entidad estima que la inflación finalizaría este año en un nivel de 2,2%, mientras que el 2021 lo haría en un nivel de 2,7%. “Junto al inicio del desconfinamiento, hay que considerar un posible efecto positivo para la inflación vinculado a un mayor consumo de las personas, por el retiro de fondos de las AFP y otras transferencias. De todas formas, estos niveles de inflación permitirían que el Banco Central de Chile mantenga su tasa de referencia en el nivel actual (0,5%) de manera prolongada, para que en su horizonte de proyecciones, de dos años, la inflación converja a su meta de 3,0%. Si bien los precios de corto plazo han ido incorporando un escenario de mayor inflación (inflación implícita en los precios a diciembre de este año paso desde un nivel de 1,6% a 2,0% durante el último mes), lo anterior, aún no se encuentra reflejado en los plazos medios. Así, las compensaciones inflacionarias para el mediano plazo (a 5 años por ejemplo) se encuentran cercanas al 2,5%, aún alejadas de la meta de 3% del Banco Central.”

Lo anterior, precisó, “puede estar vinculado a una sobrereacción en los precios a las noticias de corto plazo. De este modo, con un horizonte de inversión de más largo plazo, cuando los precios del mercado se ajusten al nivel de inflación que proyectamos, los instrumentos en UF se verían favorecidos con un mayor retorno. Dado lo anterior, es que para el inversionista con un horizonte de inversión más largo, recomendamos tener una mayor exposición a esta clase de instrumentos.”

europapress