Las regiones con mayor atractivo migratorio son Coquimbo, Valparaíso y Maule

|

Coquimbo


¿Cuáles son las características de la población que migra internamente en el país? ¿Desde y hacia qué regiones migra dicha población? Estas son las dos preguntas centrales del estudio “Migración Interna en Chile”, elaborado por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) a partir de datos del censo de 2017. Según el estudio las personas que migran internamente en el país se concentran entre los 18 y 40 años y presentan una mayor proporción de población con nivel educativo superior. También se señala el atractivo migratorio de la Región Metropolitana, la cual, a pesar de presentar una tasa migratoria negativa, concentra la mayoría de los emigrantes provenientes desde las otras regiones del país.

La migración interna se define como el desplazamiento con traslado de residencia habitual[1] desde un lugar de origen a un lugar de destino, el cual implica el cambio de División Político Administrativa (DPA) de residencia, ya sea entre regiones o desde una comuna a otra dentro del país.

El estudio de la migración permite obtener insumos relevantes para el diseño, ejecución y evaluación de diversos proyectos de desarrollo a nivel local, e identificar la necesidad de infraestructura, disponibilidad de servicios y el nivel de cobertura de vivienda, salud o educación, los cuales pueden incrementar o disminuir su demanda a raíz de los movimientos migratorios.

Generalmente, el análisis de la migración interna se realiza comparando la residencia habitual de las personas en dos puntos temporales. En el caso del último censo, esto es contrastando la residencia habitual al momento del empadronamiento censal (abril de 2017) y la residencia habitual informada hace cinco años atrás respecto de dicho momento (abril de 2012).

Según el Censo 2017 se censaron 15.329.675 personas que se encontraban residiendo en el país, tanto en 2017 como en 2012, de los cuales 84,2% son no migrantes y 15,8% son migrantes. Del total de migrantes, 957.094 equivalen a migrantes inter-regionales, es decir, personas que migraron desde una región a otra, correspondientes a 6,2% del total. Por otro lado, 1.464.574 personas cambiaron su comuna de residencia dentro de una misma región (migrantes intra-regionales), lo que equivale a 9,6% del total.

El estudio indica que usualmente las personas migran en busca de mejoras en su condición de vida, por motivos de empleo, educación o por la búsqueda de un mejor contexto medioambiental para el asentamiento residencial y dicha migración tiende a ser considerada como una estrategia para el progreso individual o familiar. Pero también puede deberse a un desplazamiento forzado a raíz de desastres medioambientales o implicar consecuencias negativas y efectos no deseados tanto en los lugares de origen como de destino de los migrantes. De la misma forma, parecieran existir ciertos momentos de transición durante el curso de vida de la población que influyen en la tendencia a migrar, como el término de la etapa educacional, la entrada al mercado laboral, la conformación de vínculos maritales y la tenencia de hijos, factores que cobran relevancia al momento de realizar un movimiento migratorio.

Según los datos observados en el estudio, variables como el sexo, la edad y el nivel educativo son factores que guardan una estrecha vinculación con la decisión de migrar, puesto que entre los migrantes inter-regionales existe una leve preponderancia de hombres (52,6%) por sobre mujeres (47,4%), más de la mitad (54,5%) se concentra entre los 18-40 años y la mayoría (44,2%) presenta un nivel educativo superior. En cuanto a la migración intra-regional, se observa una leve preponderancia de hombres (50,6%), más de la mitad (52,6%) de dichos migrantes se ubica entre los 18-40 años y el 47% alcanza el nivel educativo superior. Esto contrasta con aquella población que no migra, en la que se observa una mayor preponderancia de mujeres (51,9%), donde el grupo entre 18-40 años alcanza sólo un 33% y la mayoría ha finalizado sólo la enseñanza media (45,6%). De esta forma, en los grupos de edades menores y mayores, al igual que entre las personas con un nivel educativo básico la tendencia migratoria tiende a ser menor.

El estudio también da cuenta de las regiones que presentan un mayor atractivo migratorio (las que reciben una mayor cantidad de inmigrantes que emigrantes) y de aquellas que presentan una tendencia expulsora (con una mayor cantidad de emigrantes que inmigrantes), lo cual se observa a través de sus tasas de migración neta (TMN)[2]. Según los datos del censo de 2017 las regiones que presentan mayor atractivo migratorio son Coquimbo (7,8), seguida de Valparaíso (5,2) y la Región del Maule (3,7). En menor medida, O´Higgins (3,0), La Araucanía (3,0), Los Ríos (2,9), Ñuble (1,8) y Los Lagos (1,5) también han tendido a incrementar su población a causa de la migración interna.

En contrapartida, la región que presenta la TMN más baja es Antofagasta (-11,4), seguida por Tarapacá (-8,6) y Atacama con (-8,4). Al mismo tiempo, la Región Metropolitana mantiene su tendencia a expulsar población a una TMN de -2,2, la que si bien ha disminuido respecto de los censos anteriores, se viene registrando desde hace décadas. Por otro lado, las regiones que presentan tasas de inmigración y de emigración similares, aunque levemente negativas, son Aysén (-0,3), Magallanes (-0,4), Arica y Parinacota (-0,1) y Biobío (-0,1).

Otro punto destacado en el estudio es la centralidad y poder de atracción migratoria de la Región Metropolitana, la que a pesar de presentar una tasa de migración negativa, se constituye como el destino principal o secundario de la mayoría de los migrantes internos del país, siendo el principal destino de los emigrantes de 10 regiones: Arica y Parinacota (26,6%), Tarapacá (25,8%), Coquimbo (33,2%), Valparaíso (50,2%), O´Higgins (49,2%), Maule (47,3%), Ñuble (34,6%), Biobío (37,9%), La Araucanía (39,1%) y Los Lagos (28,3%). De las cinco regiones restantes, la Región Metropolitana se constituye como el segundo principal destino entre sus emigrantes, a saber, las regiones de Antofagasta (23,9%), Atacama (17,9%), Los Ríos (26,8%), Aysén (21,1%) y Magallanes (22,9%).

Al mismo tiempo Valparaíso también se constituye como un polo de atracción migratoria importante, ya que es el principal destino de los emigrantes de la Región Metropolitana (22,8%) y la Región de Magallanes (24,4%). Al mismo tiempo, dicha región es el segundo principal destino de las regiones de Tarapacá (16,4%), Coquimbo (19,4%) y O´Higgins (14,9%).

En la zona norte, la Región de Coquimbo es el destino principal de los emigrantes de las regiones de Antofagasta (25,8%) y Atacama (36,9%), y el segundo destino de los migrantes de la Región de Valparaíso (6,5%), mientras que en la zona sur del país se observa el atractivo migratorio que presenta la Región de Los Lagos, constituyéndose como el principal destino de los emigrantes de la Región de Los Ríos (26,9%) y de Aysén (22,7%).

El presente estudio, así como sus tabulados y principales resultados se encuentran disponibles para consulta y descarga en el siguiente link.


europapress