​Goldman Sachs pone en la picota a Endesa y cuestiona su política de 'superdividendos'

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Borja Prado

Goldman Sachs vuelve a atizar a Endesa. Si el pasado julio ponía en duda el valor de la eléctrica presidida por Borja Prado por su incapacidad para incrementar ingresos y por la pérdida de clientes, ahora insiste a los inversores en su recomendación de desprenderse de los títulos de la compañía. Ambas amenazas podrían desbaratar la política de retribución al accionista, caracterizada por sus superdividendos a la italiana Enel, propietaria y máxima accionista del grupo.

En su último análisis, el banco de inversión incluye a la compañía en una lista de peores valores del mes de agosto. El resto de empresas son AstraZeneca, Lloyds, Generali, H&M, Swisscom, Kuehne & Nagel, Carlsberg, Lindt, Covestro, Fortum y Givaudan.

Los problemas de la filial de la italiana Enel vienen, según los analistas, desde dos flancos. El principal es la caída continuada de ingresos, un mal que se extenderá “hasta 2025" y que solo se podrá solventar con un giro hacia el desarrollo de energías renovables “de manera más agresiva".

La sangría de clientes de Endesa: durante los últimos tres meses registró una pérdida de 255 cada día

El siguiente problema es la pérdida de clientes, tal y como se observó en los resultados respecto ala primera mitad de este año. Concretamente, registró una pérdida neta de 46.000 clientes, es decir, una media de 255 diarios durante los últimos tres meses, lo que "podría ejercer una presión continua sobre los volúmenes y, potencialmente, sobre los márgenes" de Endesa.

Goldman Sachs empezó a mostrar su desconfianza hacia el sector energético, en general, y hacia Endesa, en particular, hace cinco meses. Fue entonces cuando, en un primer informe, el banco estadounidense degradó la consideración sobre la eléctrica –de mantener a vender–, puesto que establecía que en dos años se iniciaría una caída de los ingresos por la revisión regulatoria que se estaba produciendo otros países y que llegaría a España.

Los ‘superdividendos’ de Endesa están en peligro

El cóctel que amenaza a Endesa, de acuerdo al informe de Goldman Sachs recogido por Bolsamania, podría terminar llevando al traste su política de superdividendos, con la que la italiana Enel, máximo accionista, se ha embolsado el 82% de lo que le costó Endesa.

Este proceso se ha producido al mismo tiempo que la compañía española ha ido aumentando su deuda. De acuerdo con los últimos resultados, la deuda financiera neta se sitúa en 5.956 millones de euros, 971 millones más (el 19%) respecto a los primeros seis meses de 2017.

Goldman Sachs cree que esta tendencia podría llegar a un punto de no retorno. En concreto, en el informe se especifica que "se deberá marcha atrás ante la necesidad de preservar un sólido apalancamiento en un escenario de inversiones crecientes". (www.economíadigital.es)

europapress