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Antonio Horvath

Recientemente cumplimos 28 años en el Congreso Nacional, un período como Diputado y tres periodos como Senador; en las tres ocasiones tuvimos el honor de haber sido elegido con la primera mayoría regional, a quienes sin duda dedico principalmente mi trabajo desarrollado por este largo período, porque si sumamos lo realizado en los diversos ministerios como Obras Públicas, Relaciones Exteriores, Dirección de Fronteras y Límites, Bienes Nacional, Planificación entre otros, supera las cuatro décadas.


Partí como independiente y rápidamente tratamos de generar redes con otros independientes de otros sectores en forma transversal y nos caracterizó el trabajar siempre en redes, esto permitió generar organizaciones no gubernamentales como la Corporación de Desarrollo de la Zona Austral, la Fundación Regionaliza, la Fundación Padre Antonio Ronchi, entre otras y a su vez nos permitió trabajar con otras ONG territoriales y ambientales, con las cuales se desarrolló un productivo trabajo que con mucho orgullo y humildad, podemos señalar que tenemos más de 40 leyes de carácter propia, como lo son la de Ozono, la primera ley anti-transgénicos, la del Monte Fitz Roy, Campo de Hielo Sur, Camino Longitudinal Austral Puerto Montt – Puerto Williams sin transbordos, incluyendo además exploraciones, la Posicionador Satelital, Generación Residencial o Ciudadana, la Ley 20-20 y recientemente la que regula la publicidad en forma más bien pública y que permite establecer los caminos de carácter escénico.


En este trabajo muchas veces nos permitió presidir y formar comisiones especiales en el Congreso Nacional, como la Especial Mixta de Presupuestos, la de Zonas Extremas y la destinada a abordar la catástrofe por el incendio en Valparaíso; además las Comisiones de Medio Ambiente, Vivienda y Urbanismo, Obras Públicas y Seguridad Ciudadana, Pesca y Acuicultura, entre otras, en las cuales también nos caracterizó el tratar de implementar una doctrina de alto grado de participación de modo que el trabajo legislativo fuera participativo y fructífero.


Entre estas leyes se pueden mencionar el proyecto que modifica la Ley General de Pesca y Acuicultura, estableciendo la obligación de instalar un sistema de posicionamiento geográfico automático con apoyo satelital en naves que indica; el proyecto que modifica la ley 4.601 Ley de Caza con el fin de proteger la fauna; modifica el artículo 158 de la Ley General de Pesca y Acuicultura, excluyendo a las zonas marítimas del Sistema de Áreas Silvestres Protegidas del Estado; Modificar los artículos 2º, 3º y 4º de la Ley General de Pesca y Acuicultura, prohibiendo la pesca de arrastre; la ley de Ozono, para proteger a los trabajadores y comunidades de la radiación ultravioleta; el derecho a la protección de cualquier daño ambiental; el proyecto que modifica la Ley General de Telecomunicaciones, ampliando la participación de las empresas en los proyectos de conectividad; la Ley del Net Metering o Medición Neta que regula el pago de las tarifas eléctricas de las generadoras residenciales o ciudadanas; la ley en materia de protección de los tiburones; la ley que establece el 14 de agosto como Día Nacional de los Radioaficionados, entre muchas más, así como algunos acuerdos importantes que permitieron sancionar con carácter legal la zonificación del borde costero que permite armonizar el uso del territorio tanto terrestre como marino y complementar las áreas silvestres protegidas del Estado más las iniciativa de carácter particular.


Después de un período tan largo y con esta experiencia uno no puede decir que se despide, sino más bien decir un “hasta pronto” porque todo lo que es la motivación pública continuará animándonos, y para eso a su vez los alentamos a leer este trabajo en www.bcn.cl/laborparlamentaria.cl, que consolidó la Biblioteca del Congreso Nacional para poder seguir las huellas que entre otros también hemos tomado nosotros.


Antonio Horvath K.

europapress